Staff (bionero.org)
CIUDAD JUÁREZ (Chihuahua).- Con al menos medio millón de vehículos automotores circulando en esta ciudad, las autoridades ignoran a ciencia cierta el destino de 4 millones de litros de aceite usado que desechan cada año los carros; el que está contaminando el suelo, agua y aire de la región.
Alma Leticia Figueroa Jiménez, investigadora de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) que investiga esta problemática ecológica, expuso que de los 5 millones de litros de aceite residual generado en un año sólo un millón tiene una disposición final adecuada.
Los 4 millones de litros que no son llevados a un centro de autorizado para disposición del aceite terminan en el suelo, en el drenaje o tiene otro tipo de uso como en cimbras o como combustible en ladrilleras, lo que se traduce en la contaminación del subsuelo, perjudica la operación de los sistemas de tratamiento de aguas residuales y contamina el aire.
La investigadora agregó que es necesaria la cooperación de las autoridades, empresas y de la misma comunidad para darle un valor a este residuo y favorecer su adecuada disposición para ser re usado o utilizado como combustible alterno.
El estudio sobre la disposición final de aceite de motor realizado por la UACJ contó con la colaboración de la Universidad Tecnológica de Austin, Texas, y fue financiado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) en el marco del Programa Ambiental México-Estados Unidos Frontera 2012.
Alberto Ramirez, Gerente de Proyectos Ambientales de la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza (COCEF), enfatizó en la importancia de contar con una estrategia en las comunidades fronterizas para el manejo integral de este tipo de residuos, ya que al valorizar este residuo se facilita su recuperación y reuso. Destacó que hay necesidad de evaluar adecuadamente el ciclo de vida de los aceites lubricantes, buscando responsabilizar a todos los integrantes del mismo, desde el productor hasta el consumidor último, a fin de establecer esquemas sustentables de manejo de estos materiales.
El profesor David Eaton, de UT Austin, expuso la evolución en la disposición final del aceite automotriz en Estados Unidos y cómo se ha favorecido la participación de la población en este proceso.
Agregó que la problemática que enfrenta Ciudad Juárez la tuvo hace algunos años Estados Unidos pero que fue posible involucrar a la población y así disminuir el desecho inapropiado de aceite.
Para Héctor Lozoya, presidente de la Unión de Yonkeros de Ciudad Juárez, es necesario que las autoridades expidan un permiso especial para que la comunidad pueda disponer del aceite automotriz usado en cualquiera de estos negocios y así evitar la disposición inadecuada.
Es decir, que los talleres mecánicos y yonkes funcionen como centro de acopio de aceite usado.
Los voceros participaron un taller para encontrar soluciones al problema del aceite usado, convocado por la COCEF en enero anterior.
Fuente: bionero.org
Staff (bionero.org)
CIUDAD JUÁREZ (Chihuahua).- Con al menos medio millón de vehículos automotores circulando en esta ciudad, las autoridades ignoran a ciencia cierta el destino de 4 millones de litros de aceite usado que desechan cada año los carros; el que está contaminando el suelo, agua y aire de la región.
Alma Leticia Figueroa Jiménez, investigadora de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) que investiga esta problemática ecológica, expuso que de los 5 millones de litros de aceite residual generado en un año sólo un millón tiene una disposición final adecuada.
Los 4 millones de litros que no son llevados a un centro de autorizado para disposición del aceite terminan en el suelo, en el drenaje o tiene otro tipo de uso como en cimbras o como combustible en ladrilleras, lo que se traduce en la contaminación del subsuelo, perjudica la operación de los sistemas de tratamiento de aguas residuales y contamina el aire.
La investigadora agregó que es necesaria la cooperación de las autoridades, empresas y de la misma comunidad para darle un valor a este residuo y favorecer su adecuada disposición para ser re usado o utilizado como combustible alterno.
El estudio sobre la disposición final de aceite de motor realizado por la UACJ contó con la colaboración de la Universidad Tecnológica de Austin, Texas, y fue financiado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) en el marco del Programa Ambiental México-Estados Unidos Frontera 2012.
Alberto Ramirez, Gerente de Proyectos Ambientales de la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza (COCEF), enfatizó en la importancia de contar con una estrategia en las comunidades fronterizas para el manejo integral de este tipo de residuos, ya que al valorizar este residuo se facilita su recuperación y reuso. Destacó que hay necesidad de evaluar adecuadamente el ciclo de vida de los aceites lubricantes, buscando responsabilizar a todos los integrantes del mismo, desde el productor hasta el consumidor último, a fin de establecer esquemas sustentables de manejo de estos materiales.
El profesor David Eaton, de UT Austin, expuso la evolución en la disposición final del aceite automotriz en Estados Unidos y cómo se ha favorecido la participación de la población en este proceso.
Agregó que la problemática que enfrenta Ciudad Juárez la tuvo hace algunos años Estados Unidos pero que fue posible involucrar a la población y así disminuir el desecho inapropiado de aceite.
Para Héctor Lozoya, presidente de la Unión de Yonkeros de Ciudad Juárez, es necesario que las autoridades expidan un permiso especial para que la comunidad pueda disponer del aceite automotriz usado en cualquiera de estos negocios y así evitar la disposición inadecuada.
Es decir, que los talleres mecánicos y yonkes funcionen como centro de acopio de aceite usado.
Los voceros participaron un taller para encontrar soluciones al problema del aceite usado, convocado por la COCEF en enero anterior.
Fuente: bionero.org
