“El nuevo Centro de Información, Documentación, Promoción y Preservación Ambiental del Desierto en el Estado de Coahuila deberá tener un enfoque multidisciplinario”, subrayan los expertos convocados al Foro Futuro Sostenible de la Vida en el Desierto, que se celebra en la Infoteca de la Universidad Autónoma de Coahuila del 25 al 27 de mayo.
“El Centro tiene que ser multidisciplinario porque la realidad es multidisciplinaria y, si lo que nosotros queremos es cambiar algo, mejorar algo, preservarlo, tenemos que comprender a fondo cómo se comporta el sistema en su totalidad y para eso hacen falta especialistas de distintas disciplinas”, consideró Pedro Berliner, del Instituto J. Blaustein para Investigación del Desierto de la Universidad de Ben-Gurión.
Tras su participación, el ejercicio organizado en conjunto entre la Oficina en México de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Gobierno del Estado de Coahuila, el experto explicó que el Centro (que sería el primero de su tipo en México) deberá estar dedicado en parte a la investigación científica, en parte a la implementación de estrategias y políticas producto de esa investigación, y en parte a la divulgación.
“Si el Centro realmente se ocupa de estos tres aspectos, la parte de divulgación le permitirá a la población estar al tanto de lo que sucede con su medio ambiente, con su entorno, y cuáles son las recomendaciones que se van a dar a nivel político; a nivel operacional puede crear un diálogo muy fructífero entre los científicos y los ciudadanos. Creo que la gran ventaja de esto es que los ciudadanos van a recibir la información directamente de la gente que ha hecho los trabajos de investigación y no a través de medios de información que a veces tienen intereses sesgados o son influenciados por factores económicos”, consideró el investigador.
Por su parte, Hernán Salas, del Instituto de Investigaciones antropológicas de la UNAM, consideró que el nuevo Centro de Información, Documentación, Promoción y Preservación Ambiental del Desierto en el Estado de Coahuila traerá beneficios inmediatos no sólo a la población de la zona, sino para las poblaciones que no están en territorios desérticos, pues potencialmente todas las zonas pueden llegar a desertificarse.
“Habría beneficios en varios sentidos, primero que nada en términos de fortalecer la cultura del agua y de lo que es la vida en el desierto. En segundo lugar, me parece que habría beneficios sociales, pues este Centro tendría también la responsabilidad de generar políticas por lo menos de manejo de la información, políticas sociales, políticas públicas que contribuyan a cuidar el agua en las zonas desérticas, pero no sólo el agua, sino el medio ambiente en general”, explicó.
El experto en el estudio de los problemas sociales de poblaciones que viven en entornos donde hay escasez, contaminación y concentración de agua en pocas manos, dijo que un sistema de información como el que se está proyectando en Coahuila contribuiría a tomar las medidas para que podamos establecer una mejor relación entre las sociedad y la naturaleza para el bienestar global.
La visión de Hernán Salas, quien ha estudiado las cuencas del Norte de México, coincide con la de Pedro Berliner, especialista en estrategias de repoblamiento del desierto de Israel, en el sentido de que el Centro de Información, Documentación, Promoción y Preservación Ambiental del Desierto en Coahuila permitirá articular mejor el uso de los recursos hídricos, pero sobre todo, involucrar a la población en la conservación, manejo y buen uso de los mismos.
“He aprendido mucho en cuanto al interés de la población que está aquí representada, pues todos los que estuvieron aquí están muy preocupados por la situación en todo lo que se relaciona con el agua, la legislación del agua y el mal uso de los recursos hídricos, que puede tener consecuencias dramáticas. Creo que todos los presentes tienen eso muy claro y mi impresión es que apoyarían la creación de un centro de este tipo, que les permita, de alguna manera, recibir un respaldo científico a los problemas que tienen. Creo que hay aquí una madurez muy grande para ligar a la población civil con los institutos de investigación. Juntos van a poner presión sobre los organismos estatales para que se creen las reglamentaciones necesarias”, señaló el investigador de la universidad israelita.
En tanto Juan Carlos Ibarra, Director del Área de Protección de Flora y Fauna de Cuatro Ciénagas, quien participó en una de las cuatro mesas de discusión que se celebraron este jueves, aconsejó involucrar en la creación del Centro a la mayor parte de actores del gobierno, de organizaciones, centros de estudios y sobre todo a la sociedad.
"Hay mucha gente que puede aportar, pero independientemente de que aporte o no, con el simple hecho de considerarlos ellos ya se sienten involucrados y eso se traduce en otros beneficios”, dijo.
Además, considera de vital importancia para el proyecto el darle continuidad a los trabajos que hoy se celebran en Coahuila y que son el resultado del interés del gobierno local por conservar, mejorar y mantener el ecosistema de la zona.
Fuente: www.unesco.org
