En 500 años, la temperatura del Distrito Federal ha cambiado hasta cinco grados centígrados por la desecación del conjunto lacustre en el Valle de México. Actualmente, las máximas en el día son mayores, en tanto, por las noches, las mínimas son más frías, expresó Ángel Ruiz Angulo, investigador asociado del Centro de Ciencias de la Atmósfera.
Al impartir la conferencia Érase una Vez un Lago: la Respuesta Térmica Asociada a la Extinción de la Cuenca Lacustre del Valle de México, explicó el efecto de acabar con un cuerpo de agua de tales dimensiones y, simultáneamente, modificar esta región hasta llegar a la metrópoli que habitamos.
El rango de la temperatura diurna era menor por la presencia del agua, es decir, el clima era más templado. Conforme desapareció el lago, se volvió cada vez más somero. La misma radiación solar calienta ahora un volumen hídrico más pequeño; el resultado: la zona lacustre absorbe más calor.
Consecuentemente, la tasa de evaporación aumenta y estos procesos conforman un ciclo de retroalimentación positivo que favorecen la merma de estas masas acuosas. Asimismo, la intensidad de los vientos crece y, en conjunto con los sedimentos finos al descubierto (sin estos cuerpos líquidos), inducen tormentas de polvo.
Conclusiones
El rango diurno promedio en superficie con lago para el periodo de secas era de unos 5.95 grados centígrados; actualmente es de 10.43. En la temporada de lluvias, con éste tendríamos 7.41°C y no los 10.92 actuales.
Los resultados de este experimento numérico muestran que la pérdida de este sistema ha generado un microclima con un calentamiento regional de hasta 5.78°C, mayor que lo visto por el cambio climático en el mismo lapso.
A raíz de este estudio, los expertos proponen un proyecto en colaboración con otros institutos de la UNAM, donde se reconstruyan las transiciones de cambio de uso de suelo cada siglo. Así, se considerará no sólo modificar la cobertura urbana, sino también la vegetación de épocas anteriores para estimar el impacto ante escenarios más realistas y proyectarlo a futuro.
Fuente:
Michel Olguín, 3 de noviembre de 2015, Cambio en el clima del Valle de México. Gaceta UNAM
