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Sociedad del conocimiento México produce menos del 1% del conocimiento científico mundial

México produce menos del 1% del conocimiento científico mundial

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ciencia-cientifico-070912En los últimos 20 años los recursos destinados en la materia se han mantenido sin incrementos importantes que potencialicen el quehacer científico

FUENTE: CINVESTAV PRENSA lunes, 10 de junio del 2013 Foto: Archivo

A pesar de contar con cerca de 20 mil científicos dentro del Sistema Nacional de Investigadores, en la actualidad laciencia mexicana produce menos de 1 por ciento del nuevo conocimiento generado a nivel mundial, reflejado través de artículos en revistas especializadas, afirmó René Asomoza Palacio, Director General del Cinvestav.

Al dictar su conferencia magistral “Un panorama de la investigación/innovación en México: prioridades y evoluciones recientes”, en el marco del Foro Franco-Mexicano para la Investigación y la Innovación, que se celebra el 10 y 11 de junio en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el titular del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) precisó que la comunidad científica de México produce anualmente alrededor de 10 mil artículos en revistas especializadas.

Con la presencia del titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, Enrique Cabrero Mendoza; la Embajadora de Francia en México, Elisabeth Beton Delègue, y el Director de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Juan Manuel Valle Pereña, Asomoza Palacio mencionó que en los últimos años no se ha trabajado adecuadamente, y quizá a eso se debe parte del rezago que tiene el país en materia de ciencia, tecnología e innovación.

Explicó que en los últimos 20 años, el porcentaje del Producto Interno Bruto del país destinado a la ciencia y la tecnología se ha mantenido entre 0.35 y 0.47 por ciento, cifra que contrasta con la de naciones como Francia que destinan el 2.5 por ciento de su PIB a estos rubros.

De acuerdo con los indicadores de productividad científica y recursos destinados a esta materia, lamentó que México registra ligeros aumentos, pero no exponenciales como sucede con otras naciones, incluso de Latinoamérica, como Brasil.

Refirió que en instancias como la UNAM, UAM, IPN y el propio Cinvestav se concentra la generación de nuevo conocimiento, al tener la mayoría de las investigaciones publicadas en revistas científicas nacionales e internacionales, lo que representa un reto para incluir nuevas instituciones en el quehacer científico.

A pesar de ello, Asomoza Palacio se dijo confiado en que a partir de la creación de la nueva Coordinación de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Presidencia de la República se mejoren las condiciones para la investigación y desarrollo en el país.

Además, dijo, porque “queda claro” que el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018 busca apuntalar la economía mexicana a partir del conocimiento.

De manera específica, los puntos del Plan Nacional de Desarrollo orientados a la educación de calidad y la competitividad de las empresas, ambos puntos en los que la ciencia, tecnología e innovación están ampliamente relacionados.

Para ello, agregó, la generación de recursos humanos de alta especialización resulta de gran importancia. En ese sentido, apuntó que el país ha incrementado exponencialmente el número de graduados del nivel doctorado, al generar de 1990 a 2012 alrededor de 32 mil 700 nuevos doctores.

También hizo referencia en la necesidad de incrementar el número de patentes obtenidas por investigadores nacionales, pues de las 14 mil solicitudes presentadas en 2011 al Instituto Mexicano de Propiedad Industrial, sólo mil fueron de creadores nacionales, mientras que el resto pretendían proteger tecnología extranjera, muchas de ellas con interés en comercializarse en el país.

Aunado a eso, mencionó Asomoza Palacio que es preciso identificar las áreas de oportunidad para el desarrollo tecnológico en el país, mismas que se pueden verse beneficiadas de la colaboración internacional.

De esa forma, subrayó que temas como energía, medio ambiente, ingeniería genética, biotecnología, tecnologías de la información o aquellas relacionadas con la manufactura avanzada orientada a aeronáutica son algunas de las vocaciones a las que el país podría dirigirse.

Fuente: Vanguardia