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Latinoamérica se une para cuidar el agua

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WASHINGTON.— Una coalición de líderes empresariales, financieros y de organismos multilaterales se dieron cita ayer en esta capital para anunciar la creación de una nueva alianza estratégica para proteger los recursos hídricos amenazados en todo el hemisferio.

“La sostenibilidad del agua no es sólo parte importante de nuestra responsabilidad social, sino un elemento crucial de nuestra estrategia de negocios”, aseguró José Antonio Fernández, director general de FEMSA y presidente del Consejo de Fundación FEMSA, al participar en el lanzamiento del proyecto “Fondos de Agua”.

El proyecto, que cuenta con una inversión inicial de 27 millones de dólares, tiene como objetivo beneficiar a más de 50 millones de personas que en la actualidad no tienen acceso a agua limpia y potable en países como Ecuador, Colombia, Perú, Brasil y México, entre otros.

Entre quienes se han sumado a este esfuerzo hemisférico, no sólo para garantizar la pervivencia de importantes recursos acuíferos amenazados, sino para preservar la biodiversidad, se encuentran el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la organización The Nature Conservancy (TNC) y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM). En el caso de México, los responsables de este ambicioso proyecto, confirmaron estudios de factibilidad en la Ciudad de Monterrey, la Riviera Maya y en Chiapas. “La escala del modelo de la Alianza es lo que la hace tan interesante”, aseguró Fernández.

“El tema de la conservación del agua, en un ambiente de cambio climático, adquiere una importancia adicional. Lo que ha hecho el cambio climático es multiplicar el caso de eventos extremos, como lluvias más agudas y periodos de sequías más severos. Y una forma de prepararse ante esta serie de eventos, que amenazan a importantes sectores de la población, es a través de este tipo de proyectos”, aseguró Federico Basañes, del BID.

Según el esquema propuesto bajo este novedoso proyecto bautizado como “fondos de agua”, se trata de una “inversión semilla”. “Un fondo de agua es una forma innovadora de pagar por los servicios que aporta la naturaleza y reinvertir ese dinero en la conservación. Debido a que una cuenca sana minimiza el costo de tratar el agua, los fondos atraen contribuciones voluntarias de los grandes usuarios del agua cuenca abajo”, dijeron los organizadores.

“Las comunidades se benefician a través de la generación de ingresos sostenibles y de la oferta de agua limpia, además de que los sistemas naturales se protegen y mantienen como hábitat para la vida silvestre y nos proporcionan agua limpia”, señaló Mark Tercek, presidente y director general de TNC.

Fuente: El Universal