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Legisladores van contra sobreexplotación de acuíferos

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El Senado de la República aprobó con 72 votos a favor, la iniciativa, del diputado priista Héctor Franco López, mediante la cual se reforma la Ley de Aguas Nacionales, con lo que se busca garantizar la sustentabilidad ambiental y el combate a la sobreexplotación de los acuíferos.

El Senado de la República informa mediante comunicado de prensa que se aprobó con 72 votos a favor la iniciativa del diputado Héctor Franco López, mediante la cual se reforma la Ley de Aguas Nacionales para proporcionar instrumentos jurídicos que permitan el combate de la sobreexplotación de los acuíferos, así como garantizar la sustentabilidad ambiental.

El legislador priista recordó que la iniciativa fue presentada en abril de 2010 y contó con el apoyo del entonces coordinador del grupo parlamentario del PRI Coahuila en San Lázaro, Rubén Moreira Valdez ( hoy diputado federal con licencia), quien en su momento consensó con las diversas fracciones parlamentarias esta propuesta que lograra ser aprobada por unanimidad el pasado 9 de marzo y que fue respaldada también por los diputados federales Francisco Saracho, Hugo Martínez, Melchor Sánchez, Héctor Fernández Aguirre, Miguel Ángel Riquelme ( hoy con licencia) Tereso Medina y Noé Garza Flores.

Al abundar sobre la iniciativa, Franco López expuso la necesidad de reflexionar sobre los mecanismos que ayuden a mejorar la gestión del vital líquido, ya que el cambio climático ha agudizado la problemática de la gestión de los recursos hídricos a nivel global y la escasez de este recurso en nuestro país ha generado diversos problemas sociales y ambientales.

Aclaró también que esta crisis, no sólo nos enfrenta a la escasez del recurso, sino también a una pérdida en la calidad del mismo, sin soslayar que la sobreexplotación, debido a la concentración de minerales presentes de manera natural en el subsuelo compromete la calidad del agua, por lo que un acuífero sobreexplotado es también un acuífero contaminado.

En la iniciativa, Franco López alerta que en diversas ciudades del norte del país, el agua que se proporciona a la población no corresponde a estándares de calidad que garanticen la salud de la misma.

Incluso, en la tribuna de San Lázaro se refirió “a lo que sucede en nuestra querida comarca lagunera, donde el denominado acuífero principal sufre una grave sobreexplotación, la cual ocasiona que, específicamente en Torreón, 65 de los 76 pozos que surten de agua potable a la ciudadanía rebasen los límites de concentración de arsénico, establecidos en las normas internacionales, por lo que consumir agua de estos representa un riesgo para la salud”.

Héctor Franco subrayó en su momento que sus reformas atendían la problemática de la principal reserva de agua dulce del país: las aguas subterráneas.

Fuente: Milenio